18 de octubre de 2008

Otro artista incomprendido.









El vive por y para crear, es un genio de nuestros tiempos... pero como siempre no consigue unir creatividad y gestión comercial.

Si ves su piezas de cerca te dan (literalmente) ganas de llorar y si tienes la suerte de conocerlo en persona tienes que dedicarle el resto del día por que tiene mil y una historias que contarte; sobre su extensa e interesante vida, sobre como crea cada pieza, sobre como mima todo lo que hace y sobre lo que le cuesta seguir adelante con una marca que hará historia.

Alguien así no debería desperdiciar su tiempo en gestionar nada que no sean sus propias creaciones; por que es como un niño pequeño, por que ve el mundo desde otro mundo, por que tiene la mirada perdida pensando en que va a ser lo próximo, por que adora la belleza de los objetos y esta cansado de que todo se le vuelva en contra.

Es una maravilla lo que hace y como lo hace, es único en lo suyo y el lo sabe; por eso va camino de Francia para triunfar desde allí. Una pena que tenga que marcharse de España para que todo le vaya bien, pero esta historia ya la hemos escuchado muchas y repetidas veces. Una vez mas el genio no es comprendido en su país. Pero espero que esta vez la historia cambie camino al éxito rotundo que merecen tantas hora de trabajo.

Una persona que merece un hueco en el mundo de la moda y dentro de la alta costura: Muñoz Vrandecic.